Se considera ciudad verde a aquella ciudad cuyos niveles de contaminación son bajos, disponen de abundantes espacios naturales, bajas emisiones de gases efecto invernadero y además la edificación es bioclimática y sostenible. ¿Existen realmente estas ciudades?
Fue en mayo de 2006 cuando la Comisión Europea decidió poner en marcha la iniciativa Capital Verde Europea. Una iniciativa que pretende reconocer y recompensar los esfuerzos locales en la mejora del entorno, la economía verde y la calidad de vida de los ciudadanos.
Medidas para una vida urbana saludable:
El premio Capital Verde Europea se concede a las ciudades que promueven una vida urbana saludable, ciudades que han mejorado mucho sus condiciones de vida a través de la puesta en marcha de distintas medidas tales como:
– Cooperación y asociación entre autoridades, ciudadanos, empresas y otras partes interesadas dirigidas a desarrollar y mejorar las condiciones de vida urbana.
– Aplicación de soluciones de movilidad sostenibles.
Creación y ampliación de parques y zonas de recreo.
– Enfoque moderno de la gestión de residuos.
– Soluciones innovadoras a la contaminación acústica.
– Enfoque integrado de la gestión urbana que garantice resultados positivos a largo plazo.
El objetivo: el principal objetivo que se persigue es generar espacios más sostenibles dando prioridad a mitigar la contaminación, la emisión de gases efecto invernadero y la gestión de recursos, es decir, creación de ciudades con el menor impacto medioambiental de forma que sean más saludables.
En la actualidad, el 80% de la ciudadanía vive en ciudades. Las urbes son los lugares donde se consume más agua, más energía y donde el transporte causa mayor contaminación, donde se consumen más productos de usar y tirar y donde se producen más residuos.
Por todo ello, es cada vez más necesario demandar modelos de ciudades sostenibles que asuman responsabilidad en la lucha contra el cambio climático.